Bubierca
Página no oficial de Rodolfo Lacal |
A principios del siglo
XIX el correo se transportaba, bien por mensajeros a caballo, bien por las
líneas de diligencias. Supongo que en el caso de Bubierca, al encontrarse sobre
la ruta que une Madrid con Zaragoza y Barcelona, el correo se transportaba en
las diligencias. No quiere ello decir que fuese muy eficiente, tal como se
colige de lo publicado en La
Revista Española de Mensajeros de las Cortes del 6 de marzo de
1836:
Hace
poco tiempo publicamos un comunicado de la administración general de correos en
que se deseaba saber, qué pueblos de la carrera de esta Corte a Zaragoza
recibían la correspondencia con algún atraso; ahora podemos satisfacer a la
pregunta de la expresada administración; y no dudamos se apresurará a adoptar
las medidas que juzgue oportunas para remediar aquel mal. Ateca, Bubierca,
Alhama, Ariza y Medinaceli son los pueblos que experimentan atraso en el recibo
de la correspondencia.
Con la llegada del
ferrocarril el servicio postal se debió de agilizar. Pero antes había llegado un
nuevo medio de transmisión de mensajes personales y oficiales: el telégrafo.
Calculo que en Bubierca llegó a finales de 1853 o en 1854; lo deduzco de la
siguiente noticia del Diario
Oficial de Avisos de Madrid del 8 de septiembre de
1853:
Dirección
de gobierno.—Telégrafos
El
día 21 del presente mes, a la una de la tarde, se rematará en pública subasta el
acopio de las maderas que se expresan en el pliego de condiciones y relación
adjunta al mismo, formados por la dirección de telégrafos y aprobado por S.M. en
los términos que a continuación se insertan.
La noticia continúa con
los detalles de la calidad de los postes requeridos, sus dimensiones, plazos de
entrega y otros detalles, y concluye con la siguiente
tabla:
Interesante que Bubierca
fuera uno de los puntos de almacenamiento de los postes que iban a ser
instalados en la comarca.
Y sobre correos solamente
he encontrado una noticia más, ya en el siglo XX, publicada en el diario La
Libertad del 18 de marzo de 1930:
Rehabilítase
a D. Miguel Bosque Undagarín como cartero de Bubierca
(Zaragoza)
Corta pero interesante
noticia. En primer lugar entiendo que hay un error en el apellido Bosque, que
debería ser Borque. Eso está claro porque parte de la familia Borque ha llevado
el apodo de "el cartero" precisamente por eso, porque un antecesor era el
cartero de Bubierca.
Por otro lado el segundo
apellido me parece también errado, dado que ya ha aparecido en otra entrega de
esta serie como Urdangarín, que sería el correcto. Ojo al dato, como decía un
famoso comentarista deportivo en mis años mozos, el apellido Urdangarín existió
por bastante tiempo en nuestro pueblo. Qué cosas.
Y por último, rehabilitan al cartero, con lo que se deduce que lo inhabilitaron previamente por alguna causa que no conocemos, pero que tuvo que ser infundada dado que lo rehabilitaron.