Quiero empezar esta serie sobre riadas del rio Jalón con una noticia graciosa en la que no se cita directamente a Bubierca.

Como probaré a lo largo de las páginas que dedicaré al río Jalón a su paso por Bubierca y comarca, era bastante frecuente que tras una fuerte tormenta o en periodos de temporal sus aguas se desbordasen a la altura de nuestra vega y afectasen tanto a la carretera nacional como al ferrocarril que unen Madrid con Zaragoza.

Lo simpático es que en este caso que traigo aquí lo habitual que era que se desbordase el río fue torticeramente usado. En El Día del 21 de abril de 1889 se podía leer la siguiente noticia:

Suspensión de una corrida

Un Juzgado de Barcelona ha condenado a la Compañía de los caminos de hierro del Norte a pagar una indemnización al empresario de toros Sr. Font por el retraso de un tren, por más que la Compañía ha alegado que el caso fue fortuito y originado por una avenida del río Jalón.

Dicho empresario tenía anunciada una corrida en la que torearía el diestro Luis Mazzantini y su cuadrilla, y éstos salieron de Madrid en el expreso; pero debiendo llegar a Barcelona a las once de la mañana, no lo hicieron hasta las cinco de la tarde. La corrida se suspendió por orden del Gobernador, y entonces el empresario entabló demanda pidiendo indemnización de perjuicios.

Otros diarios se hicieron eco de la misma noticia publicando el mismo texto. Solo el diario El Toreo del 23 de abril de 1889, como no podía ser de otra forma, aportó más detalles:

Sentencia,- Según leemos en diversos periódicos, en uno de los juzgados de Barcelona se ha dictado la siguiente en un pleito verdaderamente curioso.

El empresario que fue de la plaza de toros, señor Font, tenía anunciada una corrida el día 19 de julio del año 1885, en la que torearía el diestro Luis Mazzantini y su cuadrilla, quienes salieron de Madrid en el expreso de la Compañía del Norte, y debiendo llegar a Barcelona a las once de la mañana, no lo hicieron hasta las cinco de la tarde. La corrida se suspendió por orden del Gobernador. El empresario entabló demanda pidiendo los perjuicios que se le habían irrogado.

La Compañía de ferrocarriles se excusó diciendo que el caso había sido fortuito por haberse interceptado la linea a causa de la avenida del río Jalón, pero en el curso del pleito se ha probado que provenía del descuido de la Compañía, y, por lo tanto, se ha condenado a ésta a pagar los perjuicios reclamados por el Sr. Font.

En las más de quinientas referencias que he encontrado sobre avenidas del río Jalón en diarios y revistas del siglo XIX y siglo XX antes de la guerra civil. ninguna habla de alguna ocurrida en el año 1885, por lo que deduzco que el juez estaba en lo cierto.