Con esas fuentes he elaborado un listado de avenidas o crecidas del río Jalón por fecha que se puede encontrar más abajo. Quiero antes hacer algunas aclaraciones sobre el mismo.

Hay algunas discrepancias en fechas del estudio de la CHE y de mis investigaciones en la prensa. Entiendo que en la década de 1980 no se tenía acceso a la prensa digitalizada y eso hizo que se les escapasen algunas importantes riadas o que las situasen en meses equivocados.

Todos los especialistas del sector sabemos que no existe una frecuencia exacta de repetición de estos fenómenos. Por eso solemos hablar de "periodo de retorno" que es un término probabilístico que usamos para los estudios de obras públicas. Es decir, cuando se diseña un puente sobre un río, arroyo o barranco, su "ojo" se calcula para que resista una avenida con un periodo de retorno de X años (puede ir de 50 a 500 años o más dependiendo de la importancia de la obra, de la legislación de cada país). Pero eso no quiere decir que en pocos años no se produzcan dos.o mas de esas riadas históricas que tienen periodos de retorno de más de 50 años.

Sin embargo, de forma totalmente aproximada — y nada científica — se puede decir que el Jalón, en los dos últimos siglos, presenta una gran avenida cada 7 o 8 años.

La magnitud de las avenidas depende de muchos factores. De la concentración espacial de la lluvia que la provoca, de su intensidad (litros por metro cuadrado y hora), de la cobertura vegetal de la zona, del tipo de suelo y del relieve. Los tres últimos factores conforman lo que llamamos "tiempo de concentración", que viene a ser, grosso modo, el tiempo que transcurre entre el momento en que empieza a llover y el momento en el que llega al punto de salida del barranco, arroyo o río el caudal máximo.

Ahora bien, la virulencia de la avenida no depende sólo de su magnitud (caudal), sino también del estado del cauce del río. Si el cauce se ha invadido o modificado se pueden producir desbordamientos con más facilidad. También las obras de regulación influyen. Por ejemplo, las inundaciones del rio Mesa dejaron de ser una preocupación para las vegas de Carenas y Castejón de las Armas tras la construcción del embalse de La Tranquera. En menor medida, la pequeña zona de acumulación de agua bajo el Cerro del Martillo de Alhama para trasvasarla al embalse de La Tranquera, disipa parcialmente las avenidas que pudieran afectar la vega de Bubierca.

Cuento también con interesantes artículos sobre el efecto de las obras de construcción del ferrocarril en el río Jalón y su influencia en la magnificación de las avenidas del mismo. Lo pondré en otra entrega de esta sección.

Esta es la lista que he elaborado. En próximas entregas de esta sección sobre el río Jalón iré contando con detalle los efectos e historias conexas de aquellas que se produjeron en el siglo XIX y en el primer tercio del siglo XX.