Bubierca
Página no oficial de Rodolfo Lacal |
Sin duda, el título de
esta página debería ser más largo y añadir al actual la coletilla "que yo haya
encontrado". Me resisto a pensar que nunca antes de 1847 se había informado en
alguna publicación periódica de alguna riada del río Jalón. Más todavía teniendo
en cuenta su situación estratégica –y por lo tanto muy conocida– de pasillo
natural del valle del Ebro a la Meseta desde los tiempos de los
romanos.
Me llama la atención que
en el estudio sobre crecidas en la cuenca del Ebro, del que ya di referencia en
una anterior entrega de esta sección dedicada al río Jalón, hay citas de riadas
de muchos siglos atrás en los ríos que bajan del Pirineo y en otros de la margen
derecha, mientras que del Jalón no aparece nada hasta el año 1823. Me lleva a
pensar que las crónicas se hacían, pero no llegaban a publicarse en documentos
oficiales. Por otro lado debo decir, con gran dolor de corazón por la crítica
que voy a hacer a mis coterráneos que, mientras en la Biblioteca Nacional de
España y otras Bibliotecas Virtuales se puede acceder a multitud de periódicos
ya escaneados y digitalizados de aquellos tiempos de Madrid y otras regiones
españolas, hay una absoluta falta de diarios de Zaragoza y de Aragón en general.
Pondré solo un ejemplo. Quienes hayan leído alguna de mis notas sobre Prensa del
Siglo XIX se habrán dado cuenta de que en algunos casos he encontrado noticias
en los boletines oficiales de las provincias vecinas de Guadalajara y Soria. Me
pregunté por qué no encontré nada del boletín oficial de la provincia de
Zaragoza y acabé llegando a una página de nuestra "querida" DGA en la que sólo
están digitalizados y disponibles por internet los ejemplares a partir de ¡1975!
¿Cómo puede ser que la comunidad autónoma que cuenta con la quinta ciudad más
poblada de España tenga tal retraso en la digitalización de su documentación
histórica? Que alguien me lo explique porque no lo
entiendo.
Que me perdonen mis
lectores por mi desahogo anterior; ya no podía aguantar más. La búsqueda de
información sobre Bubierca me ha entusiasmado de tal modo desde que descubrí la
hemeroteca digital de la Biblioteca Nacional de España (grandísimos
profesionales) que me duele mucho que en mi región no se camine a la par en esa
materia.
A lo que vamos. La
primera noticia en prensa no es una descripción de una crecida sino una
referencia indirecta a una riada de la que no se cita la fecha exacta. Apareció
en El
Popular del 1 de enero de 1847:
EPILA
22.—(Correspondencia de La Opinión)— La miseria va haciéndose cada día más
terrible entre estos infelices labradores, pues además de la escasez de
cosechas, exorbitantes contribuciones del señor Mon, y una grande avenida del
río Jalón que ha causado algunos estragos, tenemos de nuevo la plaga de
comisionados cuyas dietas puede asegurarse que en el discurso del año ascienden
a la tercera parte de la cuota de la contribución, y una buena exacción con la
multa impuesta por la denuncia de una porción de estercoleros en venganza de no
haber querido votar estos electores al candidato del gobierno. Tiene mandado
este señor gefe político que dentro de los cuatrocientos pasos inmediatos a las
poblaciones y caminos no haya estercoleros, aunque sin hacer distinción entre
las capitales y pueblos meramente agrícolas como estos; pues así como en
aquellas es una disposición provechosa y de buen gobierno, en las aldeas por el
contrario tiene que infringirse con la mayor frecuencia, porque dentro de las
distancias marcadas tienen muchos labradores posesiones en las que precisamente
han de depositar los estiércoles para su beneficio.
La noticia sigue con más
detalles sobre el conflicto de los estercoleros. Como había advertido, la cita a
la avenida del Jalón es indirecta. Y no me extraña con el "cacao" que tenían
montado en Epila en esos tiempos.
La primeras riadas
realmente descritas en la prensa las he encontrado en el año 1955. La primera se
publicó con el mismo texto en El
Enano del 24 de julio de 1855 y en El
Ancora del 27 de julio de 1855:
En
Alhama ha habido una gran tempestad, que aunque solo duró una hora, hizo salir
de madre al río Jalón, que inundó al pueblo, obligando a abandonar sus casas a
muchos vecinos.
La
desbordación de aquel río ha dado por resultado la salida de madre de todos los
nueve ríos que se le unen hasta La Almunia, los que, inundando la vega de
Calatayud, han dejado a sus habitantes sin cosecha.
Si, si, había un
periódico que curiosamente se llamaba El Enano. No sé por qué le dieron ese
nombre.
Ese año 1955 tuvo otra
riada, al parecer tan importante o más que la de julio. Así se entiende lo
publicado en La
Epoca del 24 de octubre de 1855 y en el Diario
de Avisos de Madrid del 25 de octubre de 1855:
Zaragoza
23 de octubre de 1855 a las once y diez minutos de la noche.
—
El gobernador al Excmo. Señor ministro de la Gobernación: El correo de esa no ha
llegado todavía, por causa del desbordamiento del río Jalón, cuyas inundaciones
entre Ariza y Calatayud son espantosas.
En días posteriores
llegaron noticias más detalladas de lo ocurrido. En El
Clamor Público del 1 de noviembre de 1855 se
decía:
—DESTROZOS—
Las calamidades que viene sufriendo el infortunado bajo Aragón y la no menos
desgraciada Calatayud durante el corriente año, no tienen
número.
A
las anteriores hay que añadir la avenida del río Jalón el día 22, tal vez la
mayor que se ha conocido. No es necesario ponderar, porque bien se dejan
conocer, los inmensos daños que habrán causado las aguas de su desbordamiento,
convirtiendo casi toda la vega en un mar, y no respetando nada su corriente, que
llevaba muebles y ropas de cama; se ignora con seguridad de donde, si bien de
Alhama se refieren males sin cuento, y de Ateca que ha roto el puente por dos
partes.
Mucho
debió llover, y muy grande sería la salida de los barrancos, cuando el correo de
esta corte llegó el referido 22 con quince horas de
retraso.
¡Y Bubierca en medio! Por
suerte las casas están casi todas a buena altura. Sin embargo la vega debió de
ser un lago.
En La
Esperanza del 2 de noviembre de 1855 se publicó una crónica que proporciona
más detalles:
En
varios pueblos de la provincia de Zaragoza ha ocasionado pérdidas de gran
consideración la tormenta que tuvo lugar el 22, dejando aterrados a sus
moradores. El río Jalón, que tuvo una grande avenida entre Medina y Ariza,
inundó la parte baja de la población de Ateca, destruyendo el puente de
mampostería que unía al pueblo con el barrio de San Martín, dejando aislados a
aquellos habitantes e inutilizados todos los molinos.
Alhama
también fue inundada, abandonando sus casas la mayor parte de sus habitantes por
aviso de la autoridad local, pero los que, aparentando valor o confiando en sus
edificios, permanecieron en la población hubieran perecido indudablemente, a no
ser por el arrojo de la Guardia civil. Los individuos de este cuerpo,
despreciando el peligro, se lanzaron a salvar las vidas de aquellos infelices,
sacándolos de sus casas en los hombros, y abrigándolos con sus propias
ropas.
La
impetuosa corriente del río destruyó el puente y la mayor parte del término. En
algunas calles el agua se elevó a la altura de tres
varas.
Donde dice Medina supongo
que se querían referir a Medinaceli.
Para no hacer más larga
esta reseña no transcribo, pero pongo el link por si alguien lo quiere leer, la
noticia de El
Balear del 11 de enero de 1856 en la que se habla de la denegación por las
Cortes de la indemnización solicitada por el ayuntamiento de Ateca para cubrir
los daños de la riada de julio.