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Bubierca

Página no oficial de Rodolfo Lacal

Juan Lorenzo de Palacio Pérez
 
Actualizada el 5 de noviembre de 2013


Es esta otra de esas personas naturales de Bubierca que han quedado en el olvido de los bubiercanos. He llegado a saber de él gracias a la biografía de una de sus hijas. Su hija Dolores de Palacio y Azara nació en Zaragoza el 30 de marzo de 1895. Ella fue la primera mujer que entró a cursar filosofía y letras en la Universidad de Zaragoza. Su vida la podéis leer en el siguiente link sobre pioneras de la enseñanza secundaria en Aragón: http://ifc.dpz.es/recursos/publicaciones/30/71/09fdezllamasetal.pdf

Pero volvamos a Juan Lorenzo de Palacio Pérez. Supongo que dejó de joven Bubierca para comenzar su carrera militar e universitaria. Se licenció en Derecho y se casó con Dolores Consolación de Azara y Zabala, quien era descendiente de la Condesa de Bureta.

Una de las virtudes de Juan Lorenzo fue la de apoyar a su hija para realizar los estudios secundarios, cosa poco común para una mujer en esos tiempos. Y ya cuando Dolores concluyó sus estudios secundarios la animó y apoyó para que comenzase la carrera de filosofía y letras en la Universidad de Zaragoza, convirtiéndose así, en el año 1915, en la primera mujer matriculada en esa Facultad.

Dolores fue catedrática de francés en varios institutos españoles, concluyendo su carrera profesional en el Instituto de Avila, donde fue catedrática por treinta años y al parecer hoy aún se le recuerda. Falleció en 1989 a los 94 años de edad. Según su biografía, Dolores fue una mujer liberal y liberada con un gran sentido de libertad que había heredado de su padre.

Juan Lorenzo fue teniente coronel de infantería. Luchó en la guerra de Cuba y se enorgullecía de que en su unidad no se produjeron bajas.

He buscado en el censo electoral de Bubierca de 1890 si quedaban todavía miembros de la familia Palacio en Bubierca y me he encontrado con Diego Palacio Pérez, de 50 años edad en 1890, habitante del barrio del Hospital, constando como bracero. Dada la instrucción de Juan Lorenzo, que supongo era su hermano, no es de extrañar que, rompiendo la norma entre los braceros de Bubierca, Diego sabía leer y escribir.

Y mientras escribía esta reseña me he acordado de que hace unos diez años, cuando empezaba esta web sobre Bubierca, me escribió desde Valencia una joven descendiente de alhameños (de Alhama de Aragón) que me decía que su bisabuelo era de Bubierca y que tras combatir y regresar con vida de la guerra de Cuba (¿o fue de Filipinas?) entregó su espada y su sable a la ermita de la Virgen de Esperanza. Me preguntaba si todavía estaban allí. Ya no estaban y nadie me supo dar razón de dónde pueden estar. ¿Estarán conectadas las dos historias?

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